El varicocele es la presencia de várices o dilatación anormal de las venas testiculares. El tratamiento del varicocele es mediante una cirugía conocida como varicocelectomía.
Existen distintas técnicas quirúrgicas para llevarla a cabo, sin embargo la que se considera actualmente como el estándar es la que se realiza mediante microcirugía. Esto consiste en utilizar ya sea microscopio o lupas de aumento, para así identificar adecuadamente las diferentes estructuras como son la arteria del testículo, los vasos linfáticos a ese nivel y las venas varicosas que corresponden al varicocele. Se deben de ligar y cortar las venas varicosas evitando lesionar la arteria del testículo y los vasos linfáticos, disminuyendo de esta manera el índice de complicaciones.
Todo esto se puede lograr mediante una incisión pequeña, de unos 2 cm aproximadamente, donde termina la región inguinal.